El futuro del francés está en el aire pues considera que, terminando contrato, debe buscarse más minutos lejos de Bridge.
Hace no demasiado tiempo, estaba considerado uno de los jugadores más sobrevalorados de los últimos años porque su aspecto singular, sus polémicas constantes y su falta de rendimiento real sobre el césped, le estaba pasando factura. Pero tras años de experiencia, de madurez y sensatez, Nicolás Anelka hizo olvidar sus primeros años de ‘bad boy’ y de ‘trotamundos, para asentar vida y cabeza en el Chelsea, donde ha mostrado quizás su mejor nivel y estabilidad deportiva en su ya larga carrera. Una trayectoria que puede tener nuevo alojamiento en breve.
Y es que el delantero francés termina contrato este próximo verano, y a sus 32 años, consciente de lo difícil que está la competencia por la zona ofensiva en el equipo londinense, podría tomar la decisión de salir del club aprovechando que no costaría traspaso alguno a cualquier otro club que se interese en sus servicios. Tras varios días de rumores, incluso su técnico se ha visto obligad a comentar sobre el asunto y Villas-Boas cree que quizás haya decidido salir de Stamford Bridge.
"Trataremos de conseguir que renueve, pero Nico tiene que tomar su decisión por él mismo y no estoy seguro de que esa sea su voluntad”, comentó el técnico luso que, poco después, no pudo negar que el galo le ha apuntado que su intención es irse pues, al ser preguntado con claridad, respondió con un contundente “sí”.
Anelka está firmando un buen inicio de temporada y pese a la competencia, sigue teniendo opciones por delante de Fernando Torres en ocasiones (por ejemplo ante el Sunderland hace una semana) y también por encima de Didier Drogba. Desde que llegara al cuadro Blue, lleva 59 goles.
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